Puede resultar extraño y conformista pensar que la vida nunca te va a sorprender. No me considero conformista, al contrario, quizás demasiado inconformista. Me considero más bien una inconformista nata! Pero nunca pensé que en ciertas cosas la vida llegase a sorprenderme de nuevo como lo hizo.
Bueno, dejémonos de rodeos... ayer los planetas se alinearon, las estrellas brillaron a la vez que el sol y mi piel llegó a erizarse como nunca lo había hecho. A pesar de que las agujas del reloj siguieron su ritmo, el mundo llegó a detenerse y a volverse diminuto. Tan sólo un par de metros cuadrados fueron necesarios para conseguir todo eso.
Increíble, aun en una nube. Gracias por recordarme que en mi barriga caben 1001 hormigas bailando dance :) Gracias por hacerme vibrar.